24 octubre 2008

¡Qué flojera titular las entradas que en sí no hablan de nada!

Ya estoy de nuevo en Querétaro ¿Y cómo me recibe la ciudad? Con una infección en la garganta que me hizo desear drogarme para no sentir dolor (¡uy drogas!). Querétaro has ganado una batalla pero no la guerra, no señor.

Regresé después de haber ido al Motorokr fest (para mayores informes lean las miles de reseñas que seguramente hay en los miles de blogs que andan circulando por ahí). Puedo decir a mi favor que sobreviví dicho festival, después de haber peleado por mi vida, de soportar los empujones, los codazos, los pisotones; de haberme caído durante Kids de MGMT (amo a MGMT) y haberme levantado como si nada (en realidad me levantaron y no supe cómo). Lo bueno que casi siempre pude colarme hasta adelante, pero a un precio muy alto (pregúntenle a mis pies).

Los festivales deberían estar prohibidos, realmente es una grosería que haya bandas tan buenas una tras otra, no hay tiempo ni de respirar. Al final del día uno termina como si le hubiera pasado una aplanadora encima. Pero a pesar de eso, valen mucho la pena, porque uno puede sacar sus frustraciones y enojos gritando como loco y golpeando al de junto. Porque las miles de personas que nos reunimos ahí, sabemos que aunque sea por una, dos o tres horas, podemos hacer uso del anonimato que nos dan las masas y actuar como desquiciados sin importar el ridículo.

Oh sí, amo los festivales.

11 octubre 2008

¿¡Chambeando!?

Sigo en el defe conectándome a internet através de un tostador viejo. Es por eso que mi conexión es como la que se usaba en 1999 (Gracias Fany por el dato, tan acertado como siempre). Mientras tanto, he estado trabajando en la producción de un programa; lo hago para matar el tiempo, no es que yo necesite el trabajo.

Me da flojera hablar sobre el trabajo, mejor lean lo que ella ya escribió, que al cabo es la misma chamba.

Yo mejor les cuento de cosas extrañas que he visto en mi estancia en el defe: un día me tocó ver un pleito en pleno transborde del metro Tacubaya; señoras cuarentonas que no saben que pasó el dos de octubre, dos gays en un tándem; Oxxos abiertos las 24 horas (¡LAS 24 HORAS!); dos zombies comiendose a una persona... ¡un momento! eso nunca lo vi, eso fue una película. Bah, olvídenlo.

Pronto les tendré más noticias y datos que a ustedes no les interesan. Sí que sí.