04 junio 2008

Ya casi, ya casi, ya casi

Pues resulta que estoy enfrascada en una investigación que francamente se hunde como el Titanic. He hecho en estos días lo que no hice en un semestre, así que el trabajo es extenuante y ya no veo la hora de terminar con todo de una buena vez. Pero ya falta poco, puedo ver la luz al final de túnel (métafora que está por demás gastada y descontextualizada).
Me la he pasado dándole duro a las teclas para llenar hojas de word y así poder salir de la universidad. Ahora que lo pienso, toda mi carrera consitió en llenar hojas de word...qué curioso. Bueno, como sea, seguiré con la investigación hija de puta que ahora amenaza en convertirse en una tesis hija de puta. Sí. Porque ahora quieren que la haga tesis...no cabe duda que me gusta la mala vida.
Ya luego posteo cosas más interesantes cómo las 101 maneras de hacer fraude en el póker.

3 comentarios:

Lilián dijo...

Ooooh. La mandé ayer mientras charlábamos vía mensajero.

Checa el mail de Gabriel hoy por la mañana: "Así es, lo esperaba hace dos semanas, saludos".


Jo, eso, en la jerga diplomática e-mail-eril equivale a cerrarme la puerta en la cara inmediatamente después de entregarle mi trabajo en las manos.






Al fin que ni quería graduarme.

Taquero Narcosatánico dijo...

Pues suerte con eso, vas a ver que es muy gratificante acabar y mandar todo a la burguer.

Anónimo dijo...

Intentar de nuevo es una frase muy comercial, como lo es no darse por vencido.

En estos momentos intentare escuchar toda la noche a Puccini, la opera Turandot, en especial Nessun dorma del acto final de la ópera es lo mejor para la ocaciòn.

¡Que nadie duerma! ¡Que nadie duerma!

¡También tú, oh Princesa,
en tu fría habitacion
miras las estrellas
que tiemblan de amor y de esperanza...!

¡Pero mi misterio está encerrado en mí,
¡Mi nombre nadie lo sabrá!. No, no
Sobre tu boca lo diré

Sólo cuando la luz brille
¡solo sobre tu boca lo dire!
¡Y mi beso fulminará el silencio
que te hace mía.!

Su nombre nadie sabrá...
¡Y nosotras, ay, deberemos, morir, morir!

¡Disípate, oh noche!
¡Tramontad, estrellas!
¡Tramontad, estrellas!
¡Al alba venceré!
¡venceré! ¡venceré!